Ori (2.107 metros).

                                                  

                                                  Duración.- 2 horas y 47 minutos.
                                                  Desnivel acumulado.- 486 metros.

El Monte Ori se caracteriza por ser la primera montaña en superar los 2.000 metros de altura desde el Mar Cantábrico. Se considera el techo de la Selva de Irati. Destaca por sus extensas praderas y por la forma piramidal de su cima. Desde su cima se pueden obtener unas amplias vistas de los Pirineos, del valle de Larraine por la vertiente francesa y de la extensa superficie de hayas que constituye la Selva de Irati por la vertiente Navarra.

Esta montaña está cargada de mitología. En ella, según narran las leyendas, habita tanto la diosa Mari que representa a la diosa de los genios de la Naturaleza, como Basajaun que es un genio que eligió el interior de los bosques para mostrar su lado más bondadoso y en ocasiones también muestra su faceta más maligna.

Desde su cima es posible contemplar la vertiente herbosa de la parte Navarra, que contrasta con otra vertiente mucho más abrupta de la parte francesa. En ambas partes es común la práctica del pastoreo.

En definitiva, es una cumbre de fácil acceso, salvo en época de nieves, con no mucho desnivel, aunque constante desde su inicio, y que se puede realizar en una mañana.

                   

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Nuestro paseo comienza a este lado del túnel, por la senda que nos muestra esta fotografía.

Nada más empezar bordearemos una balsa para el ganado que se encuentra rodeada por esta valla para evitar posibles accidentes.

La senda está muy marcada desde el inicio, lo que facilita el ascenso.

Para llegar al collado bordeamos el Ori Txipi.

Aunque el verano está muy avanzado, estas flores dan un toque colorista a la ascensión.

Llegado a este punto tenemos dos opciones. La primera de ellas es bordear esta pala del Ori y subirlo por detrás y la segunda consiste en ascender desde este collado por la senda que podemos observar en esta fotografía. La primera opción es bastante menos dura que la segunda.

Nosotros nos decidimos por la segunda.

Una vez arriba, vemos al fondo los Pirineos y bajo nuestros pies al Ori Txipi.

En esta imagen se ve la fabulosa extensión de la Selva del Irati. Las cumbres herbosas que la presiden constituyen la Sierra de Abodi.

Buzón.

Paso que encontraremos bajando por la primera opción de ascenso que hemos comentado con anterioridad.

Cresteamos para llegar al Ori Txipi.

Llegando a nuestro segundo destino del día de hoy.

Esa loma herbosa que aparece en el centro de la fotografía es el Muxumurru (1.628 metros)

Vistas del Monte Orbizkar al otro lado del túnel.

Los Pirineos en toda su extensión.

Zoom de los Pirineos. Mesa, Pertrechema, Acherito, Chinebral de Gamueta...

Fotos con el Ori a nuestras espaldas.

Ori Txipi y Ori.

Conforme acabamos el descenso y como vamos bien de tiempo, decidimos alargar la ruta subiendo el Orbizkar.

Cruce de caminos. Al fondo aparece el monte Orbizkar con sus 1.605 metros de altura, que le convierte en la más prominente de las tres cimas con nombre de la loma de Pikantua.

Espectacular vista del Ori y Ori Txipi con sus extensos pastizales.

Nos fijamos en este cordal que arranca al otro lado del túnel. Nos parece bastante interesante y lo haremos en breves fechas. Lo constituyen el Orbizkaia en primer término, luego tenemos el Betzulagania, el Gaztararia, el Otxogorritxipia para llegar al Otxogorrigaina y al Barazea. Estos dos últimos aparecen en el fondo de la fotografía y en medio de los dos emerge la figura del Anie. 

Cima del Orbizkar.

Acabamos el día de hoy no si antes echar un vistazo atrás y fotografiar nuevamente a esta espectacular montaña. Esta vez lo hacemos desde la escuela de esquí de fondo de Abodi.