Duración.- 2 horas y 52 minutos.
Desnivel acumulado.- 317 metros.
Aprovechando el día festivo hemos decidido traspasar la muga para desplazarnos a la localidad de Hondarribi con el fin de realizar un tranquilo paseo por sus alrededores. Este paseo resulta de lo más variado ya que por un lado disfrutaremos de unas preciosas vistas marinas de gran colorido, en el que el olor a mar rezuma por los cuatro vientos y por otro lado, visitaremos el Fuerte de Guadalupe para a continuación adentrarnos en un paisaje otoñal que ya va desapareciendo de otras zonas.
En resumen este paseo nos proporciona unas hermosas vistas de la inmensidad del mar, nos traslada a principios del siglo pasado visitando la fortaleza defensiva del Fuerte de Nuestra Señora de Guadalupe y por último los bosques nos deleitan con su colorido otoñal.
Cabo.- Se denomina cabo a un accidente geográfico en el cual una lengua de tierra se adentra hacia el interior del mar. Según la extensión de dicha superficie puede tener influencia en el flujo de las corrientes marinas de la costa, dificultando la navegación.
Cabo.- Se denomina cabo a un accidente geográfico en el cual una lengua de tierra se adentra hacia el interior del mar. Según la extensión de dicha superficie puede tener influencia en el flujo de las corrientes marinas de la costa, dificultando la navegación.
Nuestro paseo comienza a la altura del faro del cabo Higer. Construído en 1.878 fue dotado de un estilo neoclásico. Se le considera el faro más oriental del Mar Cantábrico. |
Desde el mismo faro contemplamos la primera panorámica del Mar Cantábrico... |
... antes de coger esta senda... |
... que nos llevará por la costa... |
... subiendo y bajando... |
... entre prados... |
... y acantilados... |
... testigos de un mar en calma... |
... que baña las costas guipuzcoanas. |
La senda se introduce en un pequeño pinar... |
... que nos llevará hasta este mágico paisaje... |
... para volvernos a introducir en otro pinar... |
... para contemplar esta bonita vista que refleja la inmensidad del mar. |
Como vemos el paseo no tiene pérdida alguna... |
... discurriendo a través de acantilados... |
... y campos de helechos. |
Última mirada... |
... antes de dirigirnos... |
... a nuestro próximo destino de hoy. |
Aunque fue construido para acoger a 650 efectivos, la realidad fue que la mayor parte de su vida activa estuvo habitado por una pequeña guarnición del cuartel de infantería de Irun. |
Una vez acabada la visita al Fuerte nos introducimos en un paisaje otoñal... |
... en donde los amarillos... |
... y marrones nos hacen sentir la estación del año en la que nos encontramos. |
Antes de finalizar observamos como la bajamar agranda la tranquila playa de Hendaya... |
... y las nubes nos amenazan con su "negra" presencia. |
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