Duración.- 3 horas y 17 minutos.
Desnivel acumulado.- 436 metros.
Fuerte de San Cristobal o de Alfonso XII.
El Fuerte de San Cristóbal o de Alfonso XII (1878-1919) fue construido porque en 1875 el ejército carlista, tras hacerse en la acción de Lácar con varias piezas de artillería, las ubica en lo alto de dicho monte. Nada más acabar la guerra carlista, los pamploneses se ponen en contacto con las autoridades para que no vuelva a suceder otra vez lo mismo.
El Fuerte se halla escondido bajo el nivel del monte para que no pueda ser visto desde ningún lugar de la comarca. Es decir, esta edificado bajo el monte. Para ello tuvieron que excavar montones de toneladas de roca y tierra, aprovechando las piedras de la propia excavación y las de dos canteras que hay junto a la carretera. No obstante, a pesar de que el conjunto se hallaba camuflado por completo, al demorarse durante tanto tiempo las obras, sucedió que ya en la Primera Guerra Mundial se había empezado a utilizar la aviación con fines bélicos, con lo que desde el aire ya no resultaba invisible a los ojos del enemigo. Además, las bombas que podían caer desde los aviones eran mucho más devastadoras que las de la artillería convencional. Todo esto hizo que el Fuerte de San Cristóbal se quedara obsoleto antes de terminar de construirse.
La fuga del Fuerte.
El domingo día 22 de mayo de 1938 a la hora de la cena la prisión, al ser día festivo, se hallaba con el mínimo personal necesario. Algunos presos idearon la fuga y se pusieron de acuerdo para desarmar y neutralizar a los escasos efectivos que custodiaban el Fuerte. De los 2.487 presos que se encontraban en el interior del centro penitenciario lograron escapar 795 y de estos sólo 3 lograron su objetivo de cruzar la frontera y llegar a Francia. Casi todos los presos fugados fueron capturados y de ellos 211 lo pagaron con su vida, siendo los cabecillas fusilados en la ciudadela de Pamplona, más concretamente a la altura de la Puerta de Socorro.
Cementerio de las botellas.
Como nos podemos imaginar las condiciones de esa época las vida en el fuerte eran sumamente duras y eso provocaba la muerte prematura de numerosos prisioneros fruto del hambre, frío y de enfermedades nocivas como la tuberculosis. Todos esos prisioneros eran enterrados en los cementerios de poblaciones cercanas hasta que, motivado por la alta mortalidad, se decidió crear un cementerio exclusivo para los habitantes del fuerte. La peculiaridad de que cada cuerpo era enterrado junto a una botella, en la que se introducía los datos personales de la persona fallecida, hizo que a este camposanto se le denominara como el "Cementerio de las botellas".
NOTA.- A la hora del descenso, una vez llegados al cruce hacia la localidad de Ainzoain, hemos decidido coger el sendero hasta esa localidad. Pero una vez que lo hemos afrontado, hastiados de tanta senda, hemos decidido descender de forma abrupta por una senda de jabalíes de manera intuitiva. No tiene dificultad alguna pero al que no quiera hacerlo de esta manera puede seguir recto, desde el cruce, hacia la localidad de Berriozar siguiendo las balizas.
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| Antes de llegar al pueblo viejo de Berriozar aparcamos el coche en un aparcamiento habilitado junto a las escuelas... |
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| ... y caminamos unos metros por la carretera que nos lleva hasta el pueblo viejo hasta llegar a esta farola desde donde giramos a la izquierda... |
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| ... por una pequeña senda que nos lleva... |
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| ... hasta esta pista asfaltada que coincide con la ruta Hazitxo... |
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| ... y que se encuentra salpicada con multitud de esculturas como la de la imagen. |
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| Seguimos paseando... |
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| ... hacia la fuente de Eunsasi... |
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| ... la cual también alberga diferentes figuras escultóricas. |
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| Detalle fuente de Eunsasi. |
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| Vistas desde la fuente. |
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| Proseguimos ascendiendo por la senda... |
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| ... siguiendo las marcas de la GR... |
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| ... y disfrutando de la vegetación de la zona ... |
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| ... que nos protege de los rigores del calor de la mañana. |
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| Tras aparecer en este claro... |
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| ... seguimos paseando bajo el pinar... |
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| ... hasta llegar a este campo de cereal desde donde obtenemos... |
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| ... estas vistas del monte Sarbil/Etxauri. |
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| Últimos metros... |
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| ... antes de vislumbrar las antenas... |
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| ,,, que nos anuncian la proximidad del Fuerte Alfonso XII o fuerte de San Cristobal. |
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| Vistas del interior del patio del fuerte... |
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| ... desde la puerta de acceso que se encuentra cerrada. |
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| En un lateral de la puerta hay un acceso que nos permite pasear por el interior del foso de la fortaleza... |
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| ... que se encuentra repleto de ventanas saeteras a lo largo de toda su extensión. |
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| Detalle de unos de los rincones del foso. |
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| Panorámica... |
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| ... desde el interior de los arcos. |
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| Vistas... |
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| ... desde la zona somital... |
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| ... donde se encuentra... |
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| ... el ... |
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| ... buzón del monte Ezkaba/San Cristobal. |
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| Continuamos nuestro paseo... |
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| ... bordeando... |
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| ... el foso... |
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| ... intentando divisar... |
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| ... la senda de descenso... |
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| ... que girando a la izquierda... |
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| ... nos permite... |
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| ... llegar... |
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| ... a este cruce en donde decidimos continuar hacia el camino a Ainzoain... |
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| ... girando hacia la derecha para coger esta otra pista. |
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| A los pocos metros, cansados de tanta pista, giramos a la izquierda, para proseguir el descenso por un terreno de "jabalíes" por el cual bajamos de forma intuitiva... |
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| ... hasta llegar a esta pista... |
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| ... que nos aproxima a la localidad de Ainzoain. |
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| Una vez en dicha localidad nos dirigimos... |
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| ... hacia... |
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| ... la parte parte trasera de los cuarteles para llegar hasta nuestro punto de partida. |
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